Hoy estamos a lunes ¡otra vez!. Lunes en la carretera (con multa incluida), lunes de resaca post boda y lunes de reorganización de ideas por los días que vienen y se presentan intensos.
Pero lo primordial es que la prima pequeña se nos ha casao. Y ¡qué bien lo pasamos!. Porque no señores, ¡¡No todas las bodas son iguales!!. Hay bodas que pueden sorprenderte totalmente y esta ha sido una de ellas. Desde la preboda, seguido por el día en si; la breve ceremonia dentro de un marco incomparable. La novia que no podía estar más guapa y a la vez más ella. Esas palabras que nos hicieron a todos sacar los kleenex. La entrada de los novios bailando "Mi gran noche" de Raphael. Y por supuesto, el momento FOTOMATÓN, unido a una mesa repleta de quincallas para dejar volar la imaginación de los allí presentes, que voló, ¡¡vaya si voló!!
Y podría seguir aportando detalles, anécdotas, "ataques de nervios", risas etc... porque es muy gracioso el juego que da todo relativo a los momentos previos, durante y posteriores a una boda... pero prefiero un:
¡QUE VIVAN LOS NOVIOS!
Y como bien dijiste:
"Que el corazón no se pase de moda,
"Que el corazón no se pase de moda,
que los otoños te doren la piel,
que cada noche sea noche de bodas,
que no se ponga la luna de miel"...
que cada noche sea noche de bodas,
que no se ponga la luna de miel"...
2 comentarios:
Ay, Maruxiña, que ben o pasamos!!!
Jajajajaja! A ver cando nos volven chamar a bodas Pepiño!
Publicar un comentario