Ni truco ni trato

La noche de Halloween nunca me ha llamado la atención. En Madrid la gente lo celebra, se disfraza y se va a fiestas temáticas... Pero en mi caso, que me suelo apuntar a un bombardeo y más en lo que a temas de atuendos se refiere, esta noche no me apetece nada.
Creo que influye el hecho de llevar todo el finde en la calle, el tiempo lo pedía a gritos; terraceando, cañeando, papando y lo que más nos gusta ¡arreglando el mundo!... Y aunque el ritmo dominical fue más suave: latineo y sesión de cine con las chicas, una romántica sin complicaciones, de las que si en algo te hace pensar, aunque sea durante una hora y media, es en lo bonito que es el amor (sobretodo en las pelis)... pues eso, que hoy el cuerpo lo nota; está cansado, medio costipado y como algunas no hemos puenteado, pues una vez acabada la jornada, lo que me apetece es llegar a casa, ponerme cómoda (con chicho incluido), sentarme en el sofá con el ordenador en mi colo, rezando para que no se apague (estas navidades le pido uno a los Reyes), escuchar a Yann Tiersen (Tabarly), me relaja mucho... y contar algo por aquí que lo tengo un poco abandonado.
Y no mucho más. Bueno, si eso beberme una copita de vino tinto, dicen que es sanísimo, y un antioxidante maravilloso... acompañado de unos fideos chinos, ver alguna peli, no pensar demasiado y dormir a pierna suelta.

Eso sí, a pesar de carecer de todo arraigo a esta fiesta cuyos orígenes nos tocan muy de cerca, he de confesar que como buena gallega, algún día me gustaría recitar este "conxuro" alrededor de una queimada, porque no me cabe la menor duda de que "haberlas hailas"

"Mouchos, coruxas, sapos e bruxas 

Demos, trasgos e diaños, 

espritos das nevoadas veigas. 

Corvos, píntigas e meigas, 

feitizos das menciñeiras, 

podres cañotas furadas, 

fogar dos vermes e alimañas. 

Lume das Santas Compañas, 

mal de ollo, negros meigallos, 

cheiro dos mortos, tronos e raios. 

Oubeo de can, pregón da morte 

fuciño do sátiro e pé do coello. 

Pecadora língua de mala muller 

casado cun home vello. 

Averno de Satán e Bencebú, 

lume dos cadáveres ardentes, 

corpos mutilados dos indecentes 

peidos dos infernais cús, 

muxido da mar embravescida. 

Barriga inútil da muller solteira, 

falar dos gatos que andan a xaneira, 

guedella porca da cabra mal parida. 

Con este fol levantarei 

as chamas deste lume 

que asemella ao do inferno, 

e fuxirán as bruxas 

acabalo das súas escobas, 

índose bañar na praia 

das areas gordas, 

¡oíde, oíde! os ruxidos 

que dan as que non poden 

deixar de queimarse no augardente 

quedando así purificadas. 

E cando este brebaxe 

baixe polas nosas gorxas, 

quedaremos libres dos males 

da nosa ialma e de todo embruxamento. 

Forzas do ar, terra, mar e lume, 

a vós fago esta chamada 

si é verdade que tendes mais poder 

que a humana xente, 

eiquí e agora, facede cos espritos 

dos amigos que están fóra, 

participen desta queimada."